El sacerdote entró, sacó la piedra del altar y la metió en su bolsa; luego quemó los hilos de lana con el aceite sagrado sobre ellos y arrojó la ceniza afuera. Vació la pila de agua bendita, apagó la lámpara del santuario y dejó el tabernáculo abierto y vacío, como si a partir de ahora siempre fuera el Viernes Santo.
Por el padre Paul D. Scalia
Ver nota completa...
Homosexual Fernandez continuing to act as the prefect of the Dicastery for
the Doctrine of the Faith
-
Deacon Nick Donnelly
@ProtecttheFaith
In light of Amoris Laetitia and Fiducia Supplicans Cardinal Fernandez
continuing to act as the prefect of...
Hace 2 horas
No hay comentarios:
Publicar un comentario