NO LLOREMOS... YA ES TARDE PARA LAMENTOS

Los padres de la joven fallecida en aquella fiesta electrónica ya no podrán jamás disfrutar de su sonrisa porque una vez mas, la desidia se hizo dueña del poder y este es el resultado de apenas uno, de los tantos encuentros que se realizan cada fin de semana en cualquier rincón del país, con o sin permiso de las autoridades.

Por Ricardo Bustos

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