No agradecí lo suficiente a Dios por ese último beso precioso en la Eucaristía, pero Él no me retuvo sus gracias en mi ignorancia. Su único beso es suficiente para mí, por ahora. Es más de lo que merezco.
Por Stefanie Nicholas
Ver nota completa...
LA INMODESTIA ASEMEJA CON LOS VERDUGOS DE JESÚS
-
«Repara ahora, hermana mía, cómo las mujeres que lujosamente visten, están
en oposición directa con los vestidos y adornos de Jesus. O si no, dime:
¿qué ...
Hace 4 horas
No hay comentarios:
Publicar un comentario