Parece un dramático culebrón latinoamericano, y sin embargo es la triste realidad: la Iglesia parece estar "presa", en estado de ocupación, debido a muchos cambios desde dentro de la propia Compañía de Jesús que se fundó para evitarlos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)

No hay comentarios:
Publicar un comentario